Tener vocación para la vida religiosa, la mayor gracia de mi vida

En un mes de noviembre, de bastantes años atrás, recibí la llamada de Dios para ser religiosa. El, que me había escogido desde el seno materno, me llamó para formar parte de una familia religiosa por medio de una consagración pública y como respuesta a su amor fiel, sin mérito alguno por mi parte.  Nunca me he arrepentido de la decisión tomada. Puedo decir lo que dice el Evangelio, que con esta vocación he recibido el ciento por uno… y espero heredar la vida eterna.

Ser religiosa es una GRACIA INIGUALABLE. Vivir la vida consagrada en aras de la caridad para liberar a los seres humanos de sus esclavitudes, un don al que debo responder cada día con creciente amor. Dios es fiel. Me sigue seduciendo su llamada, su rostro, su amor, su predilección sobre mí, su confianza en la humildad de mi vida, su constante búsqueda…Me siguen golpeando aquellas palabras que sentí cuando vislumbre con toda claridad que su llamada era cierta ¿qué te importa ganar el mundo entero si pierdes tu alma? Tengo que agradecerle a mi madre su generosidad al dejarme partir para responder al amor eterno de Dios y a la vocación recibida. Su generosidad me acompañó todos los días de su vida,  y siempre me decía: hija mía, si la vida religiosa no es tu camino, vuélvete a casa. Las puertas de casa siempre estarán abiertas para ti. Pero añadía, yo creo que has elegido la mejor vocación del mundo. Y tenía razón. Cuando una madre te dice esto, no cabe lugar la duda

Gracias, Señor, por mi vocación religiosa. Dentro de pocos días se abrirá el año de la vida consagrada convocado por el Papa Francisco. Quiero vivirlo como la oportunidad mayor para ser cada vez más fiel en mi respuesta.

Quiero escuchar cada mañana las palabras del Salmo: escucha, hija, y pon antento oído, olvida tu pueblo y la casa de tu padre, prendado está el rey de tu belleza. El es tu Señor, póstrate ante El (Salmo 44,11)

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Una mujer galardonada con el premio nacional de fotografía 2014

 

Isabel Steva Hernández (Pincha aquí para leer la reseña que nos ofrece el periódico el mundo)

Esta mujer ha sido galardonada con el premio nacional de fotografía. «Colita» que así se la llama destaca por su trabajo serio, por su capacidad de mirar el mundo de una manera diferente, por su ingenio y por su ironía.

La fotografía es el arte que nos permite captar los instantes, las realidades, los personajes, los ambientes e incluso los sentimientos y los pensamientos de la cotidianidad… Una foto nos puede mostrar el esplendor y la belleza del alma humana, del cosmos entero y, también, lo más abyecto de lo social y lo más vil de los seres humanos. La fotografía es una revelación que nos ayuda a pensar y a cambiar.

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El museo del Prado recoge la primera exposición en España de Bernini

El periódico el mundo lo llama: Bernini, el éxtasis del barroco. Y ciertamente es uno de sus grandes exponentes.

Adjunto el artículo del periódico el mundo para saber un poco más de este genio que, siendo tan grande, está enterrado debajo de un escalón de los que suben al altar de la Basílica de Santa María la Mayor  en Roma.

ARTE Un maestro a explorar

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La comprensión del «ser del otro» y de su situación…

Es difícil comprender al «otro», o a los otros, porque no conocemos hasta el fondo su identidad original. Y, sobre todo, no la amamos gratuitamente y con desprendimiento. Llegar hasta el yo profundo de las personas es imposible, y situarse por medio de los sentimientos de la simpatía y de la empatía en lo que puedan estar viviendo, es más difícil todavía. El ser humano es un misterio.Solamente partiendo de la base del misterio podemos de verdad llegar a comprender y a perdonar. Porque somos misterio nos hacemos de alguna manera inaccesibles a los demás y los demás se hacen inaccesibles a nosotros. Se requiere no solo unos oídos que escuchan, sino un corazón que escucha. Que escucha amando, sin juzgar, y que pone en la escucha toda la positividad y la carga de amor de que es capaz para no hacer que la otra persona se hunda, sino que se levante de sus propias debilidades y miserias. La sabiduría del corazón es una sabiduría espiritual que reclama nuestra humildad, la propia aceptación de nuestras debilidades y fragilidades y comprender que hay determinados momentos de la vida en los que todos caminamos en la sombra de nuestros propios límites y problemas.

Por eso, regalar comprensión desde la gratuidad, debería ser un ejercicio de la vida humana y, más, de la vida cristiana. Yo agradezco siempre, pero siempre siempre, que se me considere en mi debilidad y en mi fragilidad. No he soñado nunca con ser nada, ni nadie. Simplemente he querido amar, servir y darme. Considero que los demás hacen lo mismo. Y que, a veces, todos nos encontramos en ese camino abrupto del vacío y de la soledad en la que nos sume la misma vida para llegar más fácilmente a Dios y para comprender siempre a los demás cuando pasan por situaciones difíciles. Quien no ha sentido la levedad del ser, la fragilidad del corazón, la debilidad de la vida, no puede comprender a otros.

Agradezco de corazón a las personas que me han comprendido hasta el fondo y hasta el final y le doy gracias a Dios por las que he podido comprender a la manera misma de Dios. En ambas situaciones, la vida ha quedado restaurada.

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La insoportable levedad del ser, obra cumbre de Milán Kundera

Milán Kundera nació en Checoeslovaquia, concretamente en Brno, el 1 de abril de 1928.

Ha sido un escritgor prolífico, que ha recibido varios premios.

Premio Medicis por la novela, «La vida está en otra parte». Premio a la mejor novela extrajera publicada en Francia

«La despedida», Premio Mondello al mejor libro editado en Italia

«La insoportable levedad del ser», considerada como su obra cumbre, llevada al cine, y que obtuvo el Premio Jerusalén.

En el año 2007 recibe el premio nacional checo de Literatura, pero no va a recogerlo, poniendo como disculpa problemas de salud.

He leído muchas obras de este autor. Pero la que más me impactó fue la «Insoportable levedad del ser»… Porque yo creo profundamente, y por experiencia, en la insoportable levedad del ser. A veces se hace insoportable la debilidad, la fragilidad, la nada. Pero Dios nos sostiene en esa insoportable levedad que todos sufrimos en determinados momentos de la vida. Se necesita valentía para saber, creer, experimentar y compartir que somos seres que participan de la levedad, de la fragilidad del ser y de los seres, de la misma historia e, incluso, del cosmos…

images.jpg milanç Biografía (pincha aquí para saber algo más de Milan Kundera)